cromosomas44xx Blog sobre temas de la mujer: la moderna, la feminista, la cibernética, la madre, la hija, la que no quiere críos, la que estudia, la que trabaja y la que busca chamba...es decir para todas las que nacimos con 46 cromosomas: 44 más XX.

Cuatro mujeres nos representaron ayer en la ceremonia de entrega de los Oscar.  Una soltera, otra divorciada, la tercera casada y la última convive con un hombre, a quien presentó como su amante.

Muchas mujeres ya hicieron historia en la alfombra roja, pero éstas tienen un aura especial.  Son ganadoras, pero ninguna lo es por haber deslumbrado en las pantallas con un cuerpo o una cara, o representando una historia bonita.  Les costó lo suyo porque son mujeres, y ellas lo saben.

Kathryn Bigelow es la primera mujer directora en ganar el Oscar.  Y según los críticos, se lo ha arrebatado de las manos al director de la película más taquillera y popular del año, la fabulosa “Avatar”.  James Cameron, su principal competidor, logró que su película recaude la increíble suma de 2,400 millones de dólares.  Conocido como el rey Midas detrás de la cámara, ganó anteriormente una estatuilla con “Titanic” y tiene en su haber éxitos como “Terminator” y “Aliens, el regreso”.  Bigelow, por el contrario, tiene en su haber películas consideradas interesantes pero nada más, como “Viajeros de la noche” y “K-19”, ésta última sobre el caso del submarino ruso Kursk.

“Zona de miedo”, sin embargo, ha sido la cinta-consolidación de Bigelow, y lo ha sido con una temática anteriormente considerada “cosa de hombres”, la guerra.  La directora trabajó con bajo presupuesto esta historia sobre un pelotón de desactivación de explosivos en Irak, retratando sin pudor los efectos de la adrenalina en los soldados.  Ninguna crítica explícita a la guerra, eran suficientes las imágenes.  Ganó limpiamente a Cameron y a otros tres directores.  Desde su silla, éste, de casualidad su ex esposo, la aplaudió a rabiar.  Había declarado que quería que ella ganara como directora, pero que sí quería el Oscar a la mejor película.  Su ex esposa le quitó ese gusto, “Zona de miedo” se impuso sobre “Avatar”.

Otra directora, muy joven, pisó por primera vez Hollywood.  Llegó con su esposo, su bebé de meses, su mamá y su musa.  Claudia Llosa no ganó la estatuilla, pero ya ha hecho historia en el cine peruano al llevarnos por primera vez a la ceremonia con “La teta asustada”, nominada como mejor película extranjera.  Más aún, ha internacionalizado un tema como el daño sufrido por las campesinas durante el conflicto con Sendero Luminso, tema pendiente de reparación en el país.  Anoche recibió, por fin, las felicitaciones del Presidente de Perú.  Alan García agradeció a Llosa por “todo lo que has hecho por el Perú”.  La directora tendrá tiempo de devolver el saludo, tal vez con un pedido de mayor atención para el cine nacional, como ya lo hizo antes.

Del lado de las actrices, que es en el rubro donde las mujeres más Oscares han logrado, también hubo hitos.  Sandra Bullock ignoró la prohibición de llorar (¿a quién se le ocurriría algo así?) al recibir su primera estatuilla y agradeció al director y guionista de “The Blind Side” (El lado oscuro) por “dejarme experimentar esto”.  Se refería a que es el primer papel dramático en su carrera.  Reina de las comedias, donde se presenta bella, graciosa e inteligente, no había tenido oportunidad de experimentar el drama.  En la película hace el papel de una madre adoptiva que lucha por integrar a su hijo, un adolescente negro.

Ni belleza ni gracia ni risa –que sí tiene- tuvieran algo que ver con el primer Oscar de Sandra.  Tal vez sí el atreverse a hacerlo y el apoyo de su pareja, Jesse James, a quien ella ya se ha referido antes como “el hombre que permite que yo trabaje porque se encarga de todo lo de la casa” (aunque tal vez lo dijo en broma).

…y Magaly Solier.  La musa de Claudia Llosa, protagonista de “La teta asustada”, la chica de Huanta que esta semana llegó a Los Angeles con la misma sencillez, pero a la vez la misma fuerza y decisión que la han hecho convertirse en lo que ya es, una estrella.  La película no ganó el Oscar pero la celebración igual siguió adelante en Manchay, en Huanta, en la Plaza de Armas y en Hollywood.  Es la chica que nos ha enseñado a todas que somos “warmikuna”, mujeres.

 A todas nos dijo Magaly en la entrega del premio a la mejor película en el Festival de Berlín:  “Tengan fuerza, no tengan miedo de hablar”.

“Llapanwarmikuna!” (a todas las mujeres) es el grito de guerra que nos regaló Magaly.  Bigelow ganó dirigiendo una película de guerra.  Claudia ganó dirigiendo una película sobre lo que ocurrió a las mujeres en la guerra.  Sandra ganó batallando contra el encasillamiento de las comedias.  Mujeres guerreras…Como todas, batallando y ganando guerras en un mundo de hombres.  Por eso, todas nos merecemos un Oscar. Feliz día, warmikunas!